En la tercera edad los problemas bucodentales suelen agravarse y también suele pasar que las soluciones se ven dificultadas por la medicación y el estado patológico de las personas afectadas.
Por lo mismo, esto se convierte en una de las preocupaciones principales del adulto mayor. No es para menos si la boca y los dientes son una parte tan importante y funcional del cuerpo humano; junto con la estética y el confort, y el objetivo de cualquier persona en cualquier edad debería ser mantener una buena salud bucodental que le permita vivir el día a día sin problemas ni dolor.
Durante la tercera edad, es posible que las personas enfrenten alteraciones referidas a su salud bucal, aun si se cepillan y utilizan hilo dental con regularidad. Esto muchas veces porque el uso de prótesis dentales, el tomar medicamentos y los trastornos generales de la salud se vuelven comunes en esta etapa. El equipo especialista en salud bucal de la Clínica odontológica Tot Dental nos cuenta cuales son algunos de los cambios que se comienzan a experimentar, generando estas preocupaciones:
- Las caries y el deterioro de las superficies radiculares de los dientes son más comunes en las personas mayores. Muchas veces incluso aunque se cepillen con una pasta de dientes con flúor, utilicen el hilo dental diariamente y visiten al dentista con regularidad.
- La sensibilidad puede agravarse a medida que se avanza en edad. Esto porque las encías se retraen con el tiempo, exponiendo zonas del diente que no están protegidas por el esmalte. Esas zonas van quedando expuestas al dolor ante alimentos o bebidas frías o calientes. Los casos más severos pueden implicar sensibilidad al aire frío, a bebidas y alimentos ácidos y dulces. Por lo general se recomienda utilizar una pasta de dientes para dientes sensibles, pero con todo y esto muchas veces el problema persiste y se debe consultar al dentista, ya que en estos casos la sensibilidad puede indicar un trastorno más serio, como una caries o un diente dañado o fracturado.
- La sequedad en la boca también se vuelve un trastorno común en las personas mayores. Puede ser causado por medicamentos o ciertos trastornos médicos y si no se trata, puede dañar los dientes. En estos casos también es importante ver al dentista, de forma que este recomiende varios métodos para recuperar la humedad de la boca, además de tratamientos o medicamentos apropiados para evitar los problemas relacionados con la sequedad bucal.
- Los trastornos de salud preexistentes, como diabetes, afecciones cardíacas o cáncer pueden afectar la salud bucal.
- Las prótesis dentales, que la mayoría de los pacientes de la tercera edad utilizan, requieren cuidados especiales; entre ellos visitar al dentista cuando se tenga algún problema y someterse a un examen anual.
- Las coronas y los puentes se vuelven útiles al reforzar los dientes dañados o reemplazar los faltantes. Además, se puede utilizar para mejorar su aspecto, forma o alineación. Estos cubren el diente faltante adhiriéndose a los dientes naturales o a los implantes que rodean el espacio vacío. Procedimiento que debe realizar un especialista en salud bucal, después del proceso diagnóstico necesario. Pero, que si luego no se cuidan de la forma indicada, pueden generar afecciones en la salud dental.
- La enfermedad de las encías es un trastorno potencialmente grave que afecta a personas de todas las edades, pero especialmente a aquéllas mayores de 40 años. Diversos factores pueden contribuir a al aumento de su gravedad y algunos de ellos se evidencian más en la vejez, como por ejemplo:
- Una dieta inadecuada
- Una higiene bucal deficiente
- Enfermedades sistémicas, como diabetes, afecciones cardíacas y cáncer
- Factores ambientales como el estrés
- Ciertos medicamentos
Lo bueno, es que como hemos venido explicando en algunos de los puntos anteriores, siempre existen ciertos cuidados que el adulto mayor puede aplicar para evitar o disminuir el impacto de estos riesgos.
Con el cuidado doméstico adecuado y revisiones dentales periódicas, los dientes pueden durar toda la vida y conservar su salud ideal. Independientemente de la edad debemos cepillarnos por lo menos dos veces al día con una pasta de dientes y enjuague bucal con flúor, utilizar el hilo dental diariamente y visitar al dentista en forma periódica para realizarnos limpiezas profesionales y revisiones, o en caso de presentar alguna molestia.Por ejemplo, los exámenes dentales periódicos aseguran la detección y el tratamiento de la enfermedad de las encías.
Las 7 razones por las que los adultos mayores suelen acudir al dentista
Como dijimos anteriormente, realizarse revisiones dentales periódicas y adquirir unos buenos hábitos de higiene y salud bucodental pueden ser un beneficio a corto y largo plazo. Si seguimos estas sencillas pautas las piezas dentales y estado de las mismas pueden durar toda la vida, independientemente de la edad que se tenga.
Sin embargo, como es probable que en la tercera edad se padezcan de alteraciones dentales o problemas de salud bucal, se puede necesitar de la intervención de un especialista, a pesar de tener unos buenos hábitos de cepillado y de usar las herramientas adecuadas. Las molestias más comunes por las que un adulto mayor visita a un dentista son:
- Revisión de caries
Esta es la revisión habitual cuando se visita al dentista, pero en el caso de la tercera edad son mucho más comunes las caries radiculares.
Este tipo de caries en concreto se desarrolla en la raíz de los dientes y puede provocar dolor, por lo que requiere de la realización de una endodoncia que insensibilice el diente o incluso de una extracción.
2. Sensibilidad dental
Como habíamos tratado en un punto anterior, a medida que se van cumpliendo años, la sensibilidad dental se va acentuando. Esto porque las encías se retraen y provocan una exposición de ciertas partes del diente que ya no están protegidas por el esmalte dental, como parte de la raíz o terminaciones nerviosas y, por lo tanto, se vuelven más propensas a sentir dolor ya sea a la hora de comer o en el momento de tomar bebidas frías o calientes. Incluso, en casos extremos, puede aparecer una sensibilidad al aire frío o a alimentos con sabores dulces o ácidos.
Esto provoca una desagradable molestia al tomar alimentos fríos, calientes, ácidos o dulces y se recurre al dentista para que aplique los procedimientos necesarios para paliar dicha molestia.
3. Sequedad en la boca
Otro de los factores que suelen aparecer en la gente de la tercera edad es la sequedad bucal, también conocida como xerostomía. Originada, en muchas ocasiones, por los medicamentos o por problemas de salud que aparecen durante esta etapa
Lejos de pensar que esto se soluciona bebiendo más agua, este estado de sequedad puede dañar los dientes si no se trata, ya que la saliva tiene una función protectora sobre la dentadura. Lo recomendable más bien es acudir al odontólogo para que este le aconseje los tratamientos adecuados para evitar esta sequedad.
Este también considerará un cuadro de diabetes o el cáncer, ya que pueden ser origen de ciertas patologías bucales que deben ser tratadas rápidamente.
4. Enfermedad periodontal
Esta enfermedad es muy común y puede pasar desapercibida porque no causa dolor. Lo alarmante de ella es que si avanza sin darnos cuenta, puede provocar la pérdida de algunas piezas dentales.
Esto se da cuando el sarro se acumula entre el diente y la encía y provoca gingivitis, que es lo que hace sangrar nuestras encías cuando nos cepillamos los dientes. Esta gingivitis puede empeorar pasando a ser una periodontitis con daños irreversibles.
Los motivos que se conocen para sufrir esta enfermedad suelen ser:
- Mala o insuficiente higiene dental.
- Genética.
- Tipos de bacterias en la boca.
- Consumo de tabaco.
- Otras enfermedades como diabetes, osteoporosis, etc.
5. Candidiasis oral
Esta enfermedad no tiene por qué presentar molestias, por lo que pasa desapercibida muchas veces. Lo que nos ayuda a reconocerla es más bien la presencia de puntos blanquecinos alrededor de la lengua y toda la boca, los cuales llegan a sangrar al rasparlos.
La candidiasis oral en la tercera edad suele estar ligada a personas con prótesis dental, higienes deficientes, problemas específicos como diabetes o boca seca y la ingestión de algunos medicamentos.
Se sabe que es muy frecuente que las personas de la tercera edad lleven prótesis que precisan de cuidados un tanto más específicos. Además que entre los tratamientos más recurridos en gente de mayor edad se encuentran las coronas y los puentes que se utilizan para reforzar las piezas dentales más perjudicadas o reemplazar las que ya no están. El problema viene cuando no se siguen de forma rigurosa las indicaciones del especialista y tanto las prótesis y coronas, como la salud bucal del paciente comienza a verse resentidas.
6. Dificultad para comer
Otro problema con las prótesis es que debido a una prótesis dental mal encajada que dañe las encías, se pueden experimentar problemas para masticar alimentos; la cual es sumamente importante para mantener un estado de salud óptimo durante la tercera edad.
7. Otras enfermedades
Existen también otras enfermedades que pueden suponer un agravante para la salud bucodental de nuestros mayores, como en el caso de la diabetes, problemas cardíacos o cáncer. Estos pueden ser motivos de peso para que se desarrollen enfermedades bucodentales a pesar de que se mantenga una buena higiene.