Ante la pandemia que estamos sufriendo como consecuencia de la propagación del coronavirus o COVID-19, además de la normativa e instrucciones excepcionales adoptadas por el Gobierno Central y Comunidades Autónomas, son numerosos los organismos e instituciones privadas o colegiadas que dentro de su ámbito de actuación han elaborado protocolos de actuación y redactado una serie de medidas preventivas especialmente dirigidas a ese sector. Así es como desde instituciones del ámbito odontológico como el Consejo de Dentistas, la Fundación Dental Española o la Sociedad Española de Ortodoncia han elaborado una serie de recomendaciones o medidas preventivas como modo general de actuación en las clínicas dentales para minimizar y evitar, en la medida de lo posible, los posibles riesgos de contagio.
Dado que las principales vías de transmisión del virus son a través de gotitas de saliva, tos, estornudos o por contacto directo con las mucosas nasal, ocular u oral, es importante realizar un cuestionario para evaluar la situación del estado general del paciente antes de realizar cualquier actuación profesional. Debido a que la distancia de trabajo en las clínicas dentales es normalmente inferior a un metro de distancia entre profesional y paciente, se aconseja demorar o retrasar cualquier tipo de tratamiento dental, con excepción de los casos que se consideren de urgencia. Esta evaluación inicial debe responder al menos a las siguientes preguntas:
- ¿Tiene fiebre o la ha tenido en los últimos 14 días?
- ¿Ha tenido tos, estornudos o algún problema respiratorio en los últimos 14 días?
- ¿Ha estado en contacto los últimos 14 días con alguna persona que haya dado positivo en coronavirus?
En caso de responder positivamente a alguna de estas preguntas se recomienda que no sean tratados. En el supuesto caso de responder negativamente a todas las preguntas, se recomienda medir la temperatura al paciente con un termómetro sin contacto directo, y si en el hipotético caso de que superase los 37,3 º se deberá avisar de un posible contagio.
En el caso de tener que atender a pacientes por alguna urgencia, nosotros os recomendamos que acudáis a la Clínica Smile Me, puesto que ellos son realmente conscientes de la situación complicada que se nos presenta y conocen de primera mano cuales son las medidas que se deberán adoptar, siendo, entre otras, las siguientes medidas de prevención:
- Programar las visitas de cada paciente, de tal manera que no coincidan varios pacientes en la sala de espera o que mantengan la mayor distancia posible entre ellos.
- Procurar que cada paciente acuda solo, evitando todo tipo de acompañantes, a excepción de los menores de edad.
- No estrechar la mano a ningún paciente.
- Indicar a cada paciente que debe lavar las manos convenientemente a la llegada y salida de la clínica dental.
- Retirar de la sala de espera periódicos, revistas, libros, cuentos, juegos infantiles, etc.
- Desinfectar convenientemente y con los productos recomendados tiradores de las puertas, interruptores de la luz, grifos del baño, pantallas, etc. que haya podido tocar el cliente.
- Ventilar y airear con frecuencia tanto la sala de espera como el box de trabajo, al menos entre un paciente y el siguiente.
- Desinfectar adecuadamente cualquier paquete, envío, prueba o registro que se haya remitido desde un laboratorio o cualquier otro lugar.
- Desinfectar convenientemente después de cada uso o después de cada paciente el sillón, taburete, cables, pantallas y por supuesto todo tipo de material e instrumental utilizado durante el tratamiento.
- Fregar el suelo con agua caliente y lejía o un producto desinfectante adecuado después de cada tratamiento.
- Es importante desechar de forma adecuada los materiales utilizados durante la consulta o el tratamiento realizado. De forma general se colocarán dentro de una bolsa de plástico cerrada mediante un nudo.
¿Cuáles son las urgencias dentales más comunes?
Por lo general las urgencias dentales están relacionadas con traumatismos, golpes, fracturas o pérdida de alguna o varias piezas dentales. Son muchas las situaciones en las que podemos vernos involucrados con la pérdida de un diente, por ejemplo, practicando deporte, tras una caída, una pelea, un accidente de tráfico, doméstico o de cualquier otro tipo. En este caso es esencial acudir a la consulta de un dentista lo antes posible y llevar con nosotros la pieza dental con el fin de que el especialista intente reimplantarla.
Otro motivo de urgencia frecuente son los procesos infecciosos, en este caso estos procesos son producto de una caries que lleva demasiado tiempo sin tratamiento y la infección se ha extendido a los nervios causando un dolor muy agudo.